miércoles, 16 de junio de 2010

Mi no renovación

Para los pocos que aún no se hayan enterado, el centro en el que trabajo ha decidido no renovarme y por tanto, rescindir mi contrato. Así pues, no pasé el periodo de pruebas.

Las razones que han motivado tal decisión ha sido una disminución de conciertos del centro que se traduce obligatoriamente en que sobra un profesor que, en el caso de mi centro, tenía mi nombre y mis apellidos.

Hoy hace exactamente dos semanas desde que empecé a recibir los primeros avisos de una noticia de la que tuve confirmación, escrita y firmada, el día de ayer. En estas dos semanas, parece que nada de esto tiene que ver conmigo, como si no fuera yo la que lo está viviendo, como si fuese un mal sueño y a la vez, la que lo está sufriendo y mucho. Tengo tal jaleo en la cabeza que soy incapaz de hacer un análisis racional de la situación y, lo que es peor, no sé que quiero hacer con mi vida.

Sufro de falta de perspectiva, de mazazo a la ilusión y de bofetón al compromiso con el código deontológico de mi profesión. Mi estado de ánimo va como las mareas, tan pronto sube como baja, tan pronto quiero echarme a llorar como estoy contenta por no haber empezado y acabado mi andadura profesional en el mismo sitio.

Quería agradecer desde aquí las incontables muestras de cariño, tanto de mis alumnos, que han demostrado un reconocimiento a mi trabajo y un afecto hacia mi persona que me hacen sentir orgullosísima; como de los amigos a los que, poco a poco, voy dando a conocer la noticia - sé que algunos os enteraréis por aquí, lo siento-. Que ahora ando un poco perdida, pero los que me conocéis sabéis que siempre tengo millones de planes en mi cabecita y van bulliendo posibilidades. Mi sitio por lo visto no estaba ahí, así que a la aventura. No hay miedo. Estoy bien.

1 comentario:

  1. Pensaba que lo de 'renovación' era por el blog, qué modernis!

    Aprovecha y ve directa a educacion.es, hay un huevo de becas e historias para profesores.

    ResponderEliminar